3º DÍA EN PARÍS

Y nuestro último día llegó: Amanecimos el domingo a las 8 de la mañana para poder entrar pronto al museo D´Orsay. Nos encontramos la  misma fila de 2 horas del día anterior así que tocó esperar, eso sí, la espera tuvo su recompensa ya que el museo es espectacular.

Obras de Manet y Monet recorrían las salas del impresionismo que para mí fueron los mejores y tuvimos la mala suerte que la obra de Van gogh estaba en una exposición privada dentro del museo, a la cual se accedida esperando otra hora de fila. 

Después de toda la mañana visitando el museo (le dedicamos dos horas de visita porque es bastante grande ), decidimos ir a comer cerca del arco de triunfo ya que el primer día no pudimos llegar porque la lluvia nos lo impidió, calándonos enteras de arriba a abajo y decidiendo coger el metro y dejarlo para el último día, ya que sabíamos que la meteorología iba a ser favorable para este día.

Recorrimos los Campos Elíseos hasta llegar a nuestro destino donde, por el buen tiempo, podías ver parejas de recién casados usando de fondo este monumento para hacerse las fotos del recuerdo de su boda.

Y por fin llegó el momento que llevaba esperando dos días, por fin fuimos a conocer la Torre Eiffel. Es tal y como imaginaba o más impresionante quizá. Este fue el momento en el que París me enamoró y ¡cómo no! me hice un book de fotos al lado de ella.

Me hubiera gustado subir a ver las vistas pero nos quedamos sin entradas y las filas de las escaleras para el primer piso daban la vuelta a toda la torre, así que me conformé con verla desde abajo y esperar a volver en otro momento a visitarla.

Lo mejor para echar un último vistazo a tu visita en París, es dar un paseo en Barco por el Sena con el cual finalizó mi visita a París, eso sí, sin antes volver a Notre Dame hacer una mejor foto que el primer día ya que el so,l nos lo permitía este domingo tan maravilloso.

Y para terminar nuestro viaje, que mejor que salir a tomar nuestras últimas copas de vino a un bar cerca de la perdición y la lujuria, cerca del Moulin Rouge.

Y la última sorpresa nos esperaba al llegar casa, unos pastelitos que solo se venden en París y en pocas ciudades más, ¡¡estaban deliciosos!!. Gracias por todo anfitriona. Paris bientôt!

LA GRATITUD Y SIMPATÍA DE LOS PARISINOS ES INCREÍBLE. 

GRACIAS CHICO@S  POR VUESTRA GRAN ACOGIDA Y VUESTRO CARIÑO.

PRÓXIMAMENTE ESTILOS DE LOS ÚLTIMOS DÍAS DE PARÍS. 

Y LO MÁS ESPERADO ¿CÓMO HACER LA MALETA PERFECTA DE VIAJE? IMPRESCINDIBLE PARA HACERLA.